En el mundo
por lo menos 1 de cada 10 jóvenes, 4 de cada 10 adultos maduros y 6 de
cada 10 hombres de edad avanzada padecen disfunción eréctil. Se trata de uno de
los trastornos sexuales más comunes pero del que prácticamente nadie quiere
hablar. Para evitar este terrible padecimiento que mina la autoestima de
muchos, un grupo de científicos de la Universidad de Ciencias de la Salud de
Georgia ha experimentado en los últimos años con un poderoso veneno de una
singular araña que podría conceder los deseos sexuales más inesperados.
La salud
sexual es un derecho de todos
La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera a la disfunción eréctil como un problema que puede causar un daño del mismo grado que el ocasionado
por la artritis reumatoide o la angina de pecho. Este padecimiento no sólo
tiene graves consecuencias en la vida de pareja si no que puede tener impacto
en todos los aspectos de la vida del individuo, al ser causa de baja
autoestima, culpa y depresión.
Aunque en los últimos años hemos observado una notable apertura en la
discusión de los temas sobre sexualidad, aún es evidente que existen tópicos de
los cuales no queremos hablar. El sexo sigue siendo un tabú y la disfunción eréctil en vez de percibirse como un problema de salud se percibe como una
falta de hombría, e incluso el nombre de impotencia sexual por el que
también se le reconoce resulta peyorativo. Por esto y otras razones se estima
que sólo el 33% de los hombres que la padecen acuden a un especialista para ser
diagnosticados y no se enteran de las causas que la generan y sus posibles
complicaciones.
De las causas posibles de que no exista erección a pesar de sentir
excitación sexual, 30% son de origen psicológico, por lo que el estrés, la fatiga
o la ansiedad nos pueden hacer pasar una mala racha. Pero el problema principal
es de origen físico ya que 70% de las causas se relacionan con el daño de los
vasos sanguíneos regularmente ocasionado por otros padecimientos como la
diabetes, la aretrioesclerosis, problemas hormonales, cirugía de próstata,
obesidad, presión alta, alcoholismo, tabaquismo o drogadicción. En muchos de
estos casos la disfunción eréctil es un síntoma que al no ser estudiado podría
pasar por alto el diagnóstico de peligrosas enfermedades que día a día van en
aumento.
Por lo anterior, es importante que este padecimiento se trate con un
especialista y así poder mantener nuestra salud sexual y ejercer todos los
derechos proclamados por la Asociación Mundial de Sexología (WAS) ¿O quién se
negaría a ejercer el derecho del placer sexual?
Tratamientos
actuales
En el
mercado existen miles de remedios que aseguran una erección en minutos. Entre
éstos podemos encontrar desde pomadas a suplementos alimenticios, productos
naturistas e incluso los servicios de brujos o chamanes con poderosos
menjurjes. Lamentablemente este tipo de ofertas no siempre cumplen con lo que
prometen.
En la
actualidad los tratamientos científicamente probados contra la disfunción eréctil consisten en bombas de vacío, cirugías y medicamentos. Éstos últimos
son los de mayor popularidad, pero sólo se cuentan con 4 fórmulas en el
mercado: Cialis, Levitra, Uprima y el popular Viagra.
En una
erección normal el cuerpo segrega óxido nítrico que mediante una molécula de
nombre cGMP permite que se relajen los músculos alrededor de las arterias del
pene haciendo que los vasos sanguíneos se dilaten y se produzca la erección. La
forma en que los medicamentos nombrados funcionan consiste en la inhibición de
una enzima de nombre PDE5 que es la encargada de degradar a la molécula llamada
cGMP, por lo cual la relajación muscular persiste hasta que el efecto del
medicamento termina.
Aunque han
mostrado gran efectividad, el 30% de los pacientes que los usan no responden a
este medicamento, y algunos sufren de síntomas secundarios como mareos,
rinitis, naúseas o dolores musculares.
La araña
milagrosa
La araña
brasileña Phoneutria nigriventer popularmente conocida como araña
bananera es considerada una de las más peligrosas en el mundo, y su veneno
además de causar edemas y vómito tiene un efecto muy particular: produce
erecciones.
Las personas
que han sido víctimas de la mordedura de esta araña de la familia Ctenidae
sufren de un padecimiento llamado priapismo, que es una erección prolongada y
dolorosa, pero también han sido testigos de notables mejorías en su vida
sexual.
Este efecto
fue de gran interés para la fisióloga de la Universidad de Ciencias de la Salud
de Georgia la Dra. Kenia Nunes quien junto con un equipo de investigadores han
extraído de la araña la toxina conocida como PnTx2-6 para realizar experimentos
con roedores.
Desde hace
algunos años se ha experimentado con ratones con enfermedades como la
hipertensión arterial y la diabetes, al igual que con ratones de edad avanzada,
consiguiendo resultados favorables.
A diferencia
de los medicamentos actuales, la toxina PnTx2-6 en vez de actuar sobre la
enzima PDE5 aumenta directamente la producción de óxido nítrico, por lo cual
sería una alternativa para aquellos que no responden a la inhibición del PDE5.
Esta posible
solución aún no se ha probado en humanos y falta tener claridad sobre los
efectos secundarios para dar el siguiente paso.
Tal vez en
próximos años podamos adquirir un nuevo fármaco producido con el mismo veneno
que ha causado tanto terror en Sudamérica y reducir el número de rompimientos
de pareja a causa de la disfunción eréctil.
Esperamos tus comentarios.
6abriela.07@gmail.com